6 consejos para el cuidado de tu perro cuando lo lleves a la playa

Como les sucede a muchos, la época del verano es sinónimo de diversión y junto a ella llega un abrasador calor que forma parte de esta época del año que muchos disfrutamos. Lamentablemente, dentro de este montón no siempre están incluidos los perros, quienes suelen llevar la peor parte. Por ello a continuación 6 consejos para el cuidado de tu perro cuando lo lleves a la playa.

 

Muchas veces pensamos que nuestra mascota, por ser animal, está acostumbrada a soportar más que el hombre y por ello dejamos de considerar algunos factores que son sumamente importantes para ellos. Además, tomando en cuenta que ellos viven bajo nuestro cuidado y techo, y que por ello ese instinto animal no está activado al 100%, peor aún para ellos.

 

Es por ese motivo que la llegada del verano no es necesariamente una época que la disfruten como nosotros lo hacemos. Pero dado que felizmente son parte de nuestra familia, sigue estos consejos para hacer de la estadía de nuestro perro la más placentera.

 

1. Llevar su propia agua y alimentos

Por el calor que hay, el perro necesita hidratarse lo suficiente, considerando además que va a estar en más movimiento que un humano. Además, por lo curioso y juguetones que son, es probable que en más de una ocasión se le tenga que lavar el hocico por toda la arena que va a acumular en esa zona.

 

No se le deben dar helados ni comida que uno suele llevar o comer cuando está en la playa. Es básico que tenga su propio alimento para que no se cruce con la dieta que lleva los demás días de la semana y que sea servido en su propio plato.

 

2. Protegerlo del sol y de los lugares calientes

Amarrar al perro y confinarlo a un pequeño espacio es algo que muchos suelen hacer y que es en un grave error. Al igual que nosotros, los perros también se queman por el calor y es muy importante tener un espacio con sombra para que pueda descansar apaciblemente.

 

Cubrirlo con algún atuendo especial es otra opción, pero ojo que no es lo mismo ponerle su chompa de invierno que un polo más acogedor, y quitársela antes de bañarse. Existen también protectores solares que no le hacen daño a las mascotas, los cuales siempre deben pedirse como tal.

 

 

3. Pasearlo y amarrado

Si bien es muy divertido ver a nuestros perros correr libre por la arena, para otras personas podría no serlo y también hay que respetar la opción de los demás. Por ello, llevarlo amarrado es lo ideal ya que sus travesuras podrían a otros molestar. Además, imagínense que les entran aquellas ganas de empezar a correr y correr sin hacer caso, y si en la calle no podemos, sobre la arena menos vamos a poder alcanzarlos.

 

Junto a estos paseos es básico llevar agua consigo ya que el perro se va a cansar más de lo habitual y, algunos, incluso hasta el agua de mar tomar. Obvio, siempre llevar bolsas para recoger sus deposiciones y antes de empezar a ir por la playa darle una vuelta por una zona más adecuada donde pueda hacer sus necesidades sin que incomode a otros, esto tomando en cuenta la misma arena no es el lugar más ideal.

 

4. No a todos los perros les gusta la playa

Al igual que los humanos, no a todos los perros les gusta la playa. Es que si no se toman las medidas necesarias del caso, cualquier ida a la playa se va a convertir en un martirio para ellos. Pero además de eso, hay aquellos que no les gusta el sol y que siempre suelen quedarse escondidos debajo de un carro o en algún lugar, apartados. Siempre hay que hacer caso a estos síntomas.

 

Siempre pasa no consideramos este tipo de opciones y que igual forma lo llevamos para no dejarlo solo en casa. ¿Qué sucede al final? Que lo terminamos a acostumbrando a algo que no quieren, y eso está mal. Hay que acordarnos que ahora existe gran variedad de hospedajes de animales y que siempre va a haber un familiar, amigo o buen vecino que lo va a querer recibir en su hogar. Pero ojo, que sea con alguien con quien el perro se sienta cómodo y con todas las pertenencias del caso para a nadie incomodar.

 

5. Muchos perros no soportarán todo un día de playa

Si bien muchos podrían estar en la playa apenas salgan los primeros rayos hasta pasada la puesta del sol, para el perro esto es diferente. Dado que ello se agotan más, muchos se incomodan luego de pasar lo que para ellos es tiempo suficiente. ¿Cuál es el tiempo idóneo, entonces? No lo hay ya que va a depender de cada uno, según su raza, fuerzas, tamaño, pelaje y otros factores más. Así que hay que estar atento a todo síntoma que pueda presentar.

 

Nuestros perros se acaloran más: por ende, más atención van a necesitar. Y si uno cree que ellos todo lo pueden soportar, es cuando esos paseos pasan a convertirse para ellos en una crueldad.

 

6. Llevarle un juguete o algo para que se divierta

Es básico llevar algo con lo que él pueda jugar, de lo contrario es probable que ellos mismos busquen con qué hacerlo. Bien podría ser algo nuestro o buscar donde el vecino más próximo. En cualquiera de los casos: no va. Además, no vaya a ser que por travieso coja algo y se haga daño.

 

El perro se divierte rápido pero también le entran momento en lo que no va a querer ser molestado. En esos momentos es mejor dejarlo solo, con todas las comodidades del caso, y con algo para que se entretenga a su manera como lo hace en casa.

 

Si uno va a llevar a su perro a playa sólo para jugar un rato con él y después dejarlo amarrado a la sombrilla o al auto, o si lo van a llevarlo solo porque su mejor amiga no pudo acompañarlas o porque sirve como buena herramienta para las conquistas, entonces vuelvan a reconsiderarlo. Y es que el perro debe ir, como siempre, como un amigo y compañero más que necesita de toda la atención y elementos para pasar un día genial. De lo contrario, ¿Quién va a volver a querer ir contigo?

 

Si deseas conocer más acerca del cuidado de tu perro, te recomendamos el siguiente informe para saber qué frutas puede tu perro comer, a través del siguiente enlace.