Aptitudes y conocimientos en un diseñador que marcarán la diferencia

Ser un profesional en el mundo del diseño gráfico es algo que con el paso del tiempo se va volviendo más competitivo, ya que en las empresas solicitan a diseñadores que tengan amplios conocimientos y habilidades para poder desempeñar cualquier tarea que se les asigne, como, por ejemplo, realizar ilustraciones. No solamente basta saber dibujar, sino que hay una serie de aptitudes que el profesional debe desarrollar para destacarse frente a otras personas de su rubro. Por ello, en esta nota, te daremos a conocer cuáles son las competencias más importantes que deben encajar en el perfil de todo diseñador ilustrador: Si es lo tuyo, no dejes de ponerlas en práctica.

Aptitudes artísticas

Lo más básico para todo ilustrador es desarrollar competencias en el mundo del arte, tales como saber dibujar y pintar de forma clara y precisa. Esto va de la mano, asimismo, con tener conocimientos sobre la anatomía humana y animal, ya que es importante poder plasmar la perspectiva de sus movimientos y así lograr que los dibujos sean más dinámicos. Muchos ilustradores empiezan pintando de forma manual, es en el proceso posterior cuando pasan sus obras a plataformas digitales.

Dominio de la Teoría del color

Conocer la teoría del color, es decir, el círculo cromático, los colores opuestos y complementarios, y la psicología que hay detrás de cada tonalidad, es algo primordial para transmitir ideas, conceptos o sentimientos a cada ilustración o diseño, al igual que las diferentes texturas, formas y volúmenes que vayan de acuerdo a una determinada estética o método artístico.  Por ejemplo, según la teoría del color, el azul es un color melancólico, entonces si una ilustración debe transmitir sentimientos tristes, la paleta de colores tiene que contener tonos azules.

Manejo del Lenguaje visual

Esto se refiere a la composición de una imagen: La forma en la que los elementos que componen el espacio deben estar distribuidos en base a jerarquías, las cuales permiten que el ojo humano vea primero el punto de mayor interés de la imagen, y los secundarios de forma sucesiva y en un orden determinado. En este punto, se podría utilizar lo que en fotografía se llama “la regla de tercios”, que consiste en poner dos líneas imaginarias de manera horizontal y vertical, y colocar los elementos importantes en los puntos de intersección. Según esta regla, los objetos en estos puntos de interés será lo primero que vea el ojos humano al ver la imagen. 

Nivel Avanzado Photoshop e Illustrator / Corel Draw

Saber utilizar los programas por excelencia de ilustración, tales como Adobe Photoshop, Illustrator y Corel Draw en un nivel avanzado. Para poder desarrollar diseños que implican de más exigencia, el profesional debe saber cómo aplicar las herramientas que ofrecen estos problemas. En el caso de Illustrator, saber sobre vectorización y colorización. Mientras que en Photoshop, es necesario que sepa sobre el uso de pinceles, máscaras y control de la iluminación. Es ideal para todo ilustrador, también, conocer sobre fotografía: modificación, composición y retoque de imágenes.

 

Atención al detalle

Un ilustrador siempre debe cuidar el mínimo detalle en su diseño que el ojo humano sea capaz de percibir, sobre todo cuando se trata de dibujos de grandes dimensiones que serán impresos. Es por ello que, al trabajar en programas como Illustrator, donde se realizan dibujos mediante el uso de vectores, es ideal utilizar, de cuando en cuando, la herramienta de zoom al máximo para asegurar que cada detalle esté perfecto. El uso de una wacom también aporta para que el dibujo sea realizado con mejor precisión, ya que es como si el diseñador estuviera dibujando a mano alzada.

Creatividad Infinita

Este punto es básico para todo aquel que se dedique al campo de la ilustración, que, si bien es una cualidad casi innata en todo artista, no hay que dejar de tener en cuenta que las ideas que funcionan con mayor frecuencia y logran sorprender al cliente son las que diferenciadas e innovadoras. Ser creativo supone también que el artista vaya desarrollando un estilo único y original.

Manejo de la Psicología de imagen

Es decir, saber discernir entre los aspectos cognitivos, socioculturales y tecnológicos que envuelven los diferentes contextos en los que vivimos, ya que es de acuerdo a esto que cada público interpreta una imagen de un determinado modo. Por ejemplo, para personas que están gestando o que ya están cumpliendo el rol de madre, se sentirán más afines a diseños de maternidad, a comparación de personas que aún no han pasado por esta experiencia.

Habilidades de negociación

El mundo del diseño está asociado al mundo del marketing: Al trabajar un diseñador para diferentes clientes, este debe tener la capacidad de persuadir y vender su producto, asegurándoles que sus necesidades estarán cubiertas. Además es en esta parte en donde el profesional puede negociar el costo de su proyecto, ya que si aplica bien los argumentos que respaldan su cotización, entonces podrá cerrar fácilmente con clientes y al precio que merece recibir.

Saber trabajar con plazos de entrega

En el campo de la ilustración y el diseño, si bien es lo común tener un concepto del trabajo más flexible, ya que muchas veces se trabaja para determinados clientes, estos suelen pedir el producto listo para una determinada fecha, a la cual el ilustrador debe ceñirse. Saber lidiar con aquellos consumidores que piden muchos cambios, a pesar de tener ya el producto final, es otro aspecto primordial para todo aquel que se dedique a este campo.

 

No dejes de investigar y aprender sobre cada uno de estos aspectos para que puedas seguir desarrollándote en este fabuloso campo artístico: Siempre busca perfeccionar tus competencias practicando con los programas de ilustración y desarrollando nuevos conceptos y estilos en tu trabajo, los cuales comuniquen y generen impactos positivos en todo aquel que lo vea.