Muchas veces cuando estamos escuchando algún tipo de exposición nos comienza a ganar el sueño y la incomodidad, esto en su mayoría por qué lo que estamos escuchando no llega a llamar por completo nuestra atención y se convierte en un total fiasco.
Es por ello que es muy importante conocer lo que el lenguaje del cuerpo nos expresa para así saber si el camino que estamos tomando es el adecuado y de lo contrario para poder cambiar nuestra comunicación para así evitar una posible negativa ante lo que estamos hablando.
Por ejemplo, si un cliente nos dice que entiende lo que ofrecemos, y sin embargo su entrecejo está arrugado, tiene una ceja más alta que la otra o arruga la nariz, es muy probable que en realidad no esté entiendo absolutamente nada. Otro ejemplo: si dice que el acuerdo se va a llevar a cabo en ese mismo día y sus ojos están mirando a otro lado o tiene los hombros caídos, puede que esté siendo complaciente y esté a la espera de otra oferta.
Pero hay algunas posturas que son un tanto más complicadas de descifrar pero que valdrán mucho a la hora de aplicarse. Es el caso de si estamos ofreciendo un servicio más caro de lo que ellos esperaban pagar, entonces es muy probable que pongan las cejas levantadas, los ojos entornados y la boca abierta. Pero si dice que la oferta es atractiva pero tiene los ojos caídos y las ventanas de la nariz dilatadas, estará pensando que nos estamos aprovechando de ellos, esto o porque estamos cobrando más de lo que creen que merece nuestro trabajo o porque no cumplimos sus expectativas en cuanto al trabajo que se va a realizar.
Si el cliente está de acuerdo con lo que ofrecemos y sonríe enseñando los dientes superiores, tiene los ojos muy abiertos y las cejas levantadas, es sinónimo de que realmente está de acuerdo con nuestros servicios y el trabajo que se ha presentado.
Si más que decir, a continuación la infografía creada por la gente de OPENForum para saber cómo detectar si nuestros clientes nos están diciendo la verdad o no.