A la gran mayoría de terrícolas nos gusta viajar, de eso no hay duda, y considerando cómo han bajado los precios de los pasajes en general, esto hace que viajar sea más accesible para todos. Pero hay un problema que esto está generando y que no se está arreglando: la cantidad de pasajeros vs. la cantidad de aviones disponibles que hay en el mercado.
Según la última Previsión Global de Mercado (Airbus Global Market Forecast, GMF), las aerolíneas latinoamericanas necesitarán 2,300 aeronaves nuevas entre 2014 y 2033, para poder atender la demanda que se especula que va a haber. Dentro de este “pedido” se incluyen 1,784 aviones de pasillo único, 481 de doble pasillo y 29 aviones de gran tamaño, con un valor estimado de $ 292,000 millones.
Según Airbus, el PBI está creciendo por encima del promedio mundial (3.9% al año frente al promedio mundial del 3.2%), por lo que se espera que en los próximos diez años la economía en América Latina y el Caribe supere a la media mundial y que la clase media en la región represente más del 40% para el 2033.
Según estos cálculos, una clase media creciente junto con una economía sólida son los motivos por el cual el tráfico aéreo en la región debería crecer 4.9% anualmente durante los próximos 20 años, superando el promedio mundial del 4.7%.
Esto hará que los flujos de tráfico en EE.UU., Brasil y América del Sur, y el de los viajes entre Europa Occidental y América del Sur, se sitúen entre los 20 mejores del mundo también para el 2033.
Hoy por hoy, casi el total de las 20 ciudades más grandes de EE.UU. y Europa se conectan con al menos un vuelo por día, frente al 40% de las 20 principales ciudades de América Latina que se conectan vía aérea diariamente. Es por ello que los norteamericanos y europeos son considerados como los ciudadanos más dispuestos a volar, con una media de 1.6 y 1.0 viajes por habitante, respectivamente.
Pero esta cosa podría cambiar ya que en los próximos 20 años, los pasajeros de Latinoamérica y el Caribe viajarán dos veces más y llegarían a los niveles del público en Europa, logrando con ello que tráfico intrarregional y nacional dentro de América Latina y el Caribe se triplique para el 2033 a un ritmo del 5.6% y se convierta así en el mayor mercado para las compañías latinoamericanas.