Todos los elementos con los que contamos en nuestro equipo de fotografía, podemos utilizarlos de varias formas. Uno de ellos es el flash externo, con el cual podemos crear una serie de fotos para armar un proyecto muy llamativo. Es así que en este artículo leerás sobre cómo hacer fotografía estroboscópica y algunas claves para tener en cuenta.
Antes de aprender este estilo fotográfico, debemos saber definición de la fotografía estroboscópica. Es aquella en la que se utiliza el Modo FLASH, haciendo que sus destellos se disparen en diferentes direcciones y en una determinada frecuencia.
Debido a esto, es que en este tipo de imágenes se puede reflejar diferentes capturas de un mismo objeto o sujeto. En otras palabras, funciona perfectamente para fotografiar secuencias. Aunque en el día a día es más usada para fotografiar secuencia de movimiento, en sí de todo lo que implique un cambio progresivo. Lo primero que tienes que hacer es establecer un tiempo aproximado de acción en la que se capturará la misma imagen.
Pongamos un ejemplo, puedes calcular un tiempo determinado para fotografiar el lanzamiento de una pelota. Luego de haber elegido el tiempo, tendrás que decidir cuántas secuencias quieres incluir dentro de tu encuadre. Si quieres fotografiar el movimiento de la pelota en 6 u 8 disparos. Por último, tienes que determinar la frecuencia por segundo, esto se realiza a través de una formula sencilla, la cual es:
Número de Disparos / Tiempo = Frecuencia por Segundo
El resultado se le llama el valor en Hertz, que es el que necesitas para realizar esta clase de capturas.
Para poder realizar este tipo de fotografía con el flash estroboscópico, debemos saber los diferentes modos de flash. Además, es el principal elemento que se requiere para hacer fotografía estroboscópica. Por este motivo, lo primero que tienes que conocer son los distintos modos con los cuales funciona el flash externo.
Modo Automático: de la misma forma que nuestra cámara fotográfica, cuenta con un modo automático, el flash externo también cuenta con uno. Esta es uno de los modos básicos, los cuales ya vienen con parámetros preestablecidos.
Modo manual: éste tiene un funcionamiento parecido al de tu cámara. Esto quiere decir que eres tú el que tiene todo el control sobre la herramienta. Es así que podrás decidir los parámetros para lograr una exposición correcta.
Modo TTL: estas siglas hacen referencia al “through the lens”(a través del lente). Hace referencia a la medición del destello a través de tu objetivo fotográfico. Cuando ese destello es captado por tu objetivo, es ahí cuando se decide si se está aplicando los parámetros adecuados para una correcta exposición. En realidad, es una función automática, no requiere de ningún tipo de cálculo.
Modo Estroboscópico: muchas personas subestiman esta función en los flashes. Sin embargo, es bastante útil y consiste en disparar distintos destellos en un tiempo determinado, usando siempre una frecuencia estricta. Este es precisamente el Modo que necesitamos para hacer la Fotografía estroboscópica.
Ahora que ya conoces todo sobre los modos de flash y qué es este estilo de imagen, te brindaremos algunos consejos para capturar las fotos estroboscópicas.
Si estamos haciendo estas fotografías, es porque manejamos al revés y al derecho nuestra cámara fotográfica. En estos casos se requiere del total control de los parámetros fotográficos para configurar la fotografía estroboscópica.
Como estaremos fotografiando un objetivo varias veces, eso quiere decir que trabajaremos con una larga exposición. Esto quiere decir que necesitamos tener la mayor estabilidad posible. Si quieres evitar problemas de desenfoque o imágenes trepidadas, es mejor que uses un trípode para fotografía estroboscópica.
Ya que estamos trabajando con apertura de diafragma cerrada, puedes intentar trabajar con valores ISO más altos que 100. Intenta dentro de ese rango para ver cómo te funciona la luz en la fotografía estroboscópica. Aunque, no debes olvidarte del ruido fotográfico. Trata de usar una sensibilidad ISO mínima, lo menor que puedas emplear en tu equipo. Sin ves que aún no es suficiente, puedes ir subiéndole a 200 o 400, siempre teniendo en cuenta la aparición del ruido fotográfico.
Una de las características de la fotografía estroboscópica es que los objetos dentro de nuestra composición lucen bien definidos. Esto le da un atractivo singular en referencia con el fondo. Para que no se produzcan sombras indeseadas, lo mejor es realizar las fotos con un fondo bastante alejado. Esto también se puede evitar usando fondos para las fotografías estroboscópicas, como por ejemplo uno de color negro.
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