Descubre qué transmiten las tipografías y su impacto en nuestras emociones
El diseño tipográfico es un concepto básico a tener en cuenta de acuerdo a lo que se busca transmitir. Pues, al igual que los colores, las tipografías transmiten emociones y sensaciones. En efecto, las personas experimentan emociones y hacen asociaciones como respuesta a diferentes tipos de letra y fuente.
Por otra parte, más allá del tipo de fuente utilizado, el espacio entre letras, palabras y párrafos también transmite. Por ello se debe tener especial cuidado al elegir la fuente. Conoce cómo se agrupan estas fuentes de acuerdo a la psicología de la tipografía.
Las fuentes serif
Provienen de la época en que se tallaba en bloques de piedra. Se introdujeron remates en los bordes de las letras, llamados serif pues resultaba complicado que terminen rectos. Este estilo tiene variedad de fuentes: romanas antiguas, egipcios, etc. Pero todas tienen serifas.
Estas fuentes son percibidas como tradicionales, respetables, serias e institucionales. Por ejemplo, están las fuentes Times New Roman, Courier, Book Antigua, Garamond.
– Egipcias: Transmiten fuerza, precisión y contundencia. El detalle de serif forma un ángulo recto con las partes perpendiculares de la letra y mantiene el mismo grosor en todas sus partes.
– Romanas: Generan sensaciones de clase, formalidad, tradición, religiosidad y delicadeza. En el caso de las Romanas Antiguas, el serif se afina a medida que llega a los extremos. Mientras que en Romanas Modernos, mantiene el mismo grosor.
Fuentes Sans serif
También se les conoce como etruscas. Apenas existe contraste entre sus trazos y no poseen serifas. Se les suele asociar con la tipografía comercial, pues son buenas para impresión de etiquetas y embalajes. Además, son ideales para visualizaciones en pantallas ya que son legibles aun en tamaños pequeños.
La psicología de la tipografía indica que transmiten modernidad, alegría, seguridad, fuerza y dinamismo. Y, en ocasiones, minimalismo o neutralidad. Las fuentes más conocidas son Arial, Helvética, Tahoma.
Script o Manuscritas
Se asemejan a la caligrafía, tienen un toque de cursiva. Por lo general, se utilizan en títulos o firmas pues los trazos finos pueden hacer que se pierda legibilidad del texto.
Estas fuentes transmiten elegancia, creatividad y afecto. Algunos ejemplos son Brush, Gótica y Vivaldi.
Fantasía
No se ajustan a ninguna de las clasificaciones anteriores. Por lo general, se han creado con un fin específico y la legibilidad no era exactamente una prioridad.
Es la categoría que más variedad tiene y, posiblemente, la más atractiva. Se suele usar en logotipos pues son diferenciales frente al resto de tipografías. Según la psicología de la tipografía, este tipo de fuentes aportan más personalidad.
Además, se pueden clasificar en:
- Caligráficas: elegancia, refinamiento, fragilidad, delicadeza.
- Scripts: juventud, espontaneidad, rebeldía.
- Góticos: antiguo, cruel, oscuro.
- Decorativas: personalidad, originalidad.
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