Perro posa para su dueño y es la imagen de sus postales navideñas cada año

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La Navidad, independientemente de su significado religioso, es -por lo general- una fecha envuelta de amor, reflexión, comprensión, que une a la familia y amigos. También es una de las celebraciones más esperadas por los niños, quienes llenos de ilusión, alegría y con una inagotable ganas de jugar, disfrutan de toda su “magia”.

Una de las principales tradiciones de esta fecha es la de enviar buenos deseos a nuestras personas más queridas y cercanas. Algunas optan por una llamada telefónica, otras por mandar mensajes de correo o, con la tecnología de ahora, hablar por Skype, Whatsapp, dejar un saludo en Facebook, Twitter o cualquier red social.

Fuente: Cosas bonitas

Pero, hasta hoy en día, una de las maneras más divertidas y que denotan un mayor esfuerzo, dedicación y cariño, es la de enviar postales personalizadas. Esto, sin embargo, para mucha gente resulta trabajoso e, incluso, estresante, aunque gratificante, después de terminado el cansado proceso.

No solo se trata de juntar a la familia y rogar para que el adolescente, con todos sus cambios hormonales encima, se anime a sonreír. Que, al menos, en una foto todos salgan con los ojos abiertos o que el más “listo” no coloque cuernos con sus dedos sobre la cabeza de alguien.

Fuente: Imágenes Stop

Las postales personalizadas consisten, además, en pensar cada año una nueva temática y si, queremos ser originales, quizás ver vestuarios, armar una especie de escenario, por más simple que sea. En conclusión, dejarnos llevar por nuestra creatividad sin importar los rostros de vergüenza de los demás miembros de la familia.

El fotógrafo inglés, Peter Thorpe, ha logrado llevar ese espíritu navideño más allá. Desde el año 1990, Thorpe comenzó a hacer sus propias tarjetas de Navidad para su familiares, amigos y clientes, con la ayuda de (¡adivinen!) Paddy, su perro por aquel entonces y personaje principal de las postales.

Rudolf (1990)

Fuente: Peter Thorpe Photography

Paddy fue su ayudante por un largo tiempo, pero desde el 2006 Raggle, el perro que rescató y con el que convive en la actualidad, cogió el relevo. Por desgracia, esta tradición habría llegando a su fin, las tarjetas al parecer ya no se realizarían más, pues Raggle, debido a su edad, se retira.

La estrella de estas fotos posa para su amigo humano con diferentes disfraces y se transforma en cualquier otro animal. Lo más increíble es que Peter no hace uso de Photoshop para crear estas imágenes, él utiliza verdaderos decorados y demás complementos, que ponen de manifiesto su arte y tanto su paciencia como la del perro.

Raggle siguiendo la estrella (2006)

Fuente: Peter Thorpe Photography

“La diversión para mí ha sido la elección de las escenas, seguir creando cada componente de estas tarjetas yo mismo, en lugar de usar Photoshop. Hacer mis propios sets, atuendos y contar con mi apoyo canino, usando un poco de comida como soborno”, señaló Thorpe.

Tras horas de diseño, preparación, montaje, la construcción de los sets, las postales muestran personajes y escenas fácilmente reconocibles y representativas de esta época. De esta forma, vemos a Raggle como uno más de los chicos en los típicos coros, poniendo la estrella en la punta del árbol navideño, o como Papá Noel en la chimenea.

Les dejamos con algunas de nuestras postales favoritas, así como con algunas tomas de los “detrás de cámaras”. Podemos disfrutar de estas y otras imágenes en la web oficial de Peter Thorpe.

1. El rescate de Santa (2015)