Sucede algunas veces que salimos a la calle a dar un paseo y nos encontramos con un buen clima, pero sobre todo, con un lindo arcoíris, el cual llega a ser un fenómeno que no sucede a menudo en la ciudad, y es por eso que debemos aprovechar ese momento. Así que en esta nota te brindaremos algunos consejos fáciles para que sepas cómo hacer fotos de arcoíris y no fallar en el intento.
Este fenómeno de colores suele durar pocas horas, por eso debes estar alerta para poder sacar hermosas imágenes. Debes tener en cuenta el fondo, porque quizás hay algunos elementos que no queremos que salgan. Por eso, es preferible ser muy cuidadoso con la fotografía de arcoíris. Si quieres lograr alguna composición con una persona u objeto, procura que estos complementos no arruinen la imagen.
El trípode es uno de los equipos esenciales de la fotografía, pues nos sirve tanto para capturar imágenes estáticas, paisajes, etc. Entonces, no podía faltar este pequeño amigo para retratar las fotografías de arcoíris. Este accesorio nos ayudará a tener mejor precisión a la hora de disparar y así poder capturar la belleza de este fenómeno natural. Además de poder captar con precisión los colores, y no tener imágenes desenfocadas o mal encuadradas.
Como se ha mencionado muchas veces, el ritmo fotográfico nos puede ayudar a tomar mejores retratos. Por este motivo, con las fotos de arcoíris se pueden crear efectos de ritmo creciente y decreciente. Al retratar con esta pequeña técnica, haremos que nuestra imagen luzca y se va más completa, ya sea tanto en la composición como en lo visual. Si quieres saber más sobre este tema, puedes leer este artículo: ¿Qué es el ritmo visual en la fotografía y cómo aprovecharlo?
Ahora es momento de la configuración y aquí tocaremos el tema del diafragma y el ISO en este tipo de fotografía. En primer lugar, está el diafragma, que es recomendable trabajarlo con niveles altos: a partir de 11 a más. Porque la luz de las primeras horas del día, donde mayormente aparece este fenómeno, es un poco fuerte y puede afectar la foto.
Después de tener una buena configuración de diafragma, seguimos con los ajustes del ISO, el cual debe estar en nivel bajo. De esta manera, no chocará con la luz, ni muchos menos causará ruido o algo. Sobre la velocidad, ésta debe estar balanceada con los dígitos del diafragma y del ISO, pero se sugiere que esté en un nivel estándar para que no afecte mucho a las fotos del arcoíris.
Finalmente, está el famoso balance de blancos, factor importante para retratar de manera casi perfecta las fotos de arcoíris. Debes elegir el modo automático o luz del día. Sin embargo, en algunas existe el modo personalizado, donde se puede configurar de la manera que quieras el balance. También, existe otro, que es “Kelvin”, donde se mide la temperatura de color, y se podría tirar para el lado de las tonalidades cálidas o frías, dependiendo de lo que quieres lograr.
Ahora que ya sabes un poco más de cómo hacer fotos al arcoíris, puedes dejar fluir tu creatividad a nivel máximo. Si todavía estas comenzando en el mundo de la fotografía, puedes llevar un curso de manejo de cámara para que así ya estés listo a salir a recorrer distintos lugares y fotografiar todo lo que te guste.
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