Muchas veces resulta un poco complicado e intimidante, establecer y negociar las tarifas de un fotógrafo independiente ante sus clientes. En la mayoría de los casos, al momento de hacer la negociación hay inseguridad, y se piensa que se está cobrando demás al cliente. Entender cómo negociar tus tarifas de servicio profesional, es uno de los pasos más importantes para emprender tu carrera profesional, y ser exitoso. Debes aprender a valorar y que valoren tu trabajo, así sea lo más simple que realices.
Una de las recomendaciones, es que tengas creencia absoluta de tus habilidades. Por eso en este artículo, te ayudaremos con 6 pasos básicos para que en tu próxima sesión fotográfica, tengas la seguridad de cuánto cobrarle a tus clientes.
Cuando comprendes lo que necesita y por qué necesita cierto servicio tu cliente, las negociaciones tienden a tener mayor probabilidad de éxito. Cuando conoces a un cliente, debes comprender y clasificar sus necesidades y las tuyas. Aunque no lo creas los precios poco asequibles, para los usuarios, son una preocupación. En el caso de que la persona sea el que haga a primera oferta, generalmente busca anclar ese precio por tu servicio. Por ejemplo: Un cliente puede decir que solo tiene un presupuesto de $ 800. El mensaje aquí puede ser a veces que el cliente está realmente dispuesto a pagar $ 800 o más. De la misma manera, puedes indicar tus precios aclarándole al cliente que para el servicio que te está solicitando cobras un precio mayor.
Dado que su oferta probablemente se convertirá en la parte superior del rango de precios, debes tener cuidado con la cifra que pides. Ese rango superior se convierte en su ancla de costos de tus fotografías de producto. En esencia le está pidiendo al cliente que acepte una cifra más cercana a sus costos. En caso que sea muy baja, te resultará muy difícil pedirle luego al cliente que pague más. Al establecer tus tarifas, deja un margen de maniobra para la negociación, es probable que no siempre alcance el precio total de venta.
Hay algunas diferencias clave entre un fotógrafo interno y un profesional independiente. El profesional independiente fija sus propios precios, mientras que el fotógrafo interno generalmente trabaja por un salario. Los fotógrafos profesionales independientes a menudo, cobran en función del valor percibido de sus fotos. Al ser independientes, normalmente intentan comprender las necesidades de los clientes, haciendo un poco más flexible el tarifario de fotografías.
Considera el presupuesto del cliente, ¿cuál es su negocio? y ¿para qué utilizarán las fotos?. Por ejemplo, el precio de la fotografía de eventos en un seminario, puede variar de las tarifas típicas que esperaría para la fotografía de productos para un minorista de calzado. También puedes negociar tarifas basadas en derechos y uso. Las fotos de uso único comisionadas, pueden atraer una tarifa más baja en comparación con las fotos de uso múltiple. El valor que tu cliente atribuye a las fotos, generalmente dicta el precio.
Cuánto más profesional seas al momento de la negociación, generas más confianza en tus clientes, y aceptarán con facilidad tus precios. Los usuarios de tu servicio no querrán saber que a otras personas les cobras menos por el mismo trabajo. Cuanto más profesional sea en el proceso de negociación, más aceptarán tus clientes tus tarifas. Los clientes no quieren sentir que se les cobra más que a otros por el mismo servicio, tampoco que les están fijando un precio basado en ideas preconcebidas sobre quiénes son. Por esta razón, es recomendable tener precios estandarizados disponibles para que los clientes potenciales los vean.
Como fotógrafo independiente crea materiales como una lista de precios profesional en un folleto donde se explique el trabajo que realizas de la mano con tu portafolio, para que se tenga evidencia de los trabajos anteriores que haz realizado. Una vez que un prospecto se contacte contigo, envía una propuesta formal junto con la lista de precios y el folleto. Se puede persuadir a la mayoría de las personas para que paguen por lo que perciben como calidad. Sus habilidades de marketing y comunicación son grandes oportunidades para mostrar calidad y profesionalismo.
Las preguntas más frecuentes que se podría hacer una persona que quiere contratar tus servicios profesionales, podrían ser: ¿Por qué servicios me estás cobrando? ¿Qué tan bueno es tu trabajo? ¿Puedes ser completamente responsable y puntual en tu trabajo? Aquí se debe dejar muy en claro el precio del fotógrafo por la producción que se realizará. Incluye en tu resumen de trabajo, los horarios y plazos para establecer expectativas justificables. Al momento de enviarle los precios a tu cliente, asegúrate de incluir el uso del equipo, los viajes y los procesos de postproducción.
Algunos procesos de edición tardan más y utilizan herramientas más costosas para lograrlo. Es aconsejable establecer sus tarifas, de acuerdo al tiempo que pasará en postproducción. Además, asegúrate de que tu cliente sepa que los plazos más largos pueden deberse al mayor tiempo dedicado a la edición. Al negociar, si el cliente rechaza sus tarifas, tienes la opción de negociar una tarifa con descuento, con otras opciones de servicio.
Por lo general, se recomienda que las negociaciones, se hagan de manera personal. Procura en las especificaciones tener la cotización de cada acción que realizas, pues establecer una conexión auténtica con tus prospectos puede persuadirlos para que acepten tu propuesta. Una relación positiva, puede hacer que la sesión sea una experiencia mucho mejor para ti y su cliente. Un ambiente positivo puede conducir a mejores resultados, que cuando no hay una buena relación.
En lugar de enviar tus precios y detalles por correo electrónico u otra red social, considera la opción de reunirte con la persona, así podrás discutir mejor las dudas, consultas y darle un mejor alcance de la producción de tu trabajo. Así te volverás más confiable, recuerda ser agradable y profesional para que se genere con éxito la aceptación de las tarifas de los fotógrafos.
Por otro lado en lo que son las tarifas de los fotógrafos de eventos, quizá hayan situaciones que no sean muy cómodas para ti en lo que respecta a los prospectos que desea un usuario. Algunas perspectivas pueden necesitar servicios diferentes a los que usted proporciona, otros pueden ser difíciles de trabajar. No actúes por desesperación o tomar todo tipo de trabajos que se le presenten, su capacidad de alejarse de condiciones desfavorables es una poderosa herramienta de negociación.
Si llegas a aceptar algún acuerdo por desesperación, es posible que tu cliente no valore como se debe tu trabajo. El cliente puede acumular demandas adicionales y exprimirlo para obtener tarifas más bajas.
Recuerda que si tu no valoras tu trabajo, nadie lo hará. Establece tarifas, compara con otros fotógrafos independientes, para que vayas de la mano con ellos y no quedes atrás de tu competencia. Muéstrate seguro y profesional al momento de la reunión para explicar cada detalle de tu producción fotográfica. Si te interesa el mundo de la fotografía y quieres ahondar en el tema, entonces lo recomendable sería que tomes un diplomado en dirección fotográfica, que te brindará todas la claves necesarias para convertirte en ese profesional que deseas ser.
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