Fotografía

Tips que te ayudarán a tomar increíbles fotografías de gatos

Si fotografiar niños o bebés es complicado, imagínate lo que sería sacarle un par de tomas a los animales domésticos, como perros o gatos, los cuales constantemente se encuentran moviéndose y jugando por todos los lados.

Verdaderamente es difícil y casi toda una odisea capturar una buena pose, lo cual puede tardar horas de horas, y lo peor de todo es que de las cien que fotografiaste solo una será perfecta.

Esta vez nosotros compartir algunos tips que ayudarán a tomar increíbles fotografías de gatos, las cuales te harán a hacer esta travesía mucho más sencilla.

Si no eres tan fan de los gatos y amas a los perros, también te dejamos un link con unos consejos que servirán a capturar espectaculares tomas de ellos.

1. Tienes que ser muy paciente

Fuente: Google

El fotografiar pequeños felinos puede ser un poco difícil, ya que a diferencia de los perros, no colaboran tanto, pues los gatos no son un tema ideal para los fotógrafos impacientes, ya que no hacen poses obligatorias por mucho tiempo.

Quiere decir que nunca podrás saber qué poses vas hacer con ellos, puede que colaboren, que se acerquen hasta tu lente a ver qué pasa, podrán darte poses divertidas  o simplemente se voltearán y te ignorarán. Típico de los gatos.

 

2. Prepara tu cámara fotográfica  

Fuente: Google

Cuando hablamos de poses divertidas, nos referimos especialmente cuando están medio dormidos. Ese es el momento en donde obligatoriamente tienes que tener una cámara a la mano y sino, tu Smartphone también sirve.

Pero ten mucho cuidado y sé muy sigiloso, ya que si haces mucha bulla es probable que el gato te escuche y se mueva.

 

3. Haz sonidos para llamar su atención 

Si bien puedes encontrar poses muy divertidas cuando duerme, también las puedes encontrar mientras juegas, una muy buena fórmula es hacerlo jugar con sus juguetes preferidos o llamar su atención con los ruidos crujientes, por lo que puedes atravesar una bolsa de papel para que el gato mire hacia ti.

 

4. Encuentra la perspectiva correcta

Fuente: Google

Un error común cometido por los fotógrafos de mascotas en ciernes es que fotografían a su gato o perro desde una altura humana. Esto rara vez funciona bien. Las fotos de los animales tomadas en su propio nivel tienden a tener un mayor impacto y muestran mejor la personalidad del animal, desde la perspectiva de un igual.

 

5. Haz un buen enfoque a sus ojos

Fuente: Google

Los ojos son lo que llaman más la atención. Si vas a tomar un retrato de primer plano de tu gato, es importante asegurarse que los ojos estén enfocados. Es sorprendentemente fácil equivocarse en los animales, ya que solo se necesita un ligero descuido para enfocarse en la nariz. La cámara que utilice y el tamaño del sensor afectarán lo fácil que es.

La cámara de un teléfono generalmente te proporcionará mucha profundidad de campo, por lo que es difícil desenfocar los ojos, mientras que una SLR con un sensor más grande brinda una profundidad de campo menor y exige más control sobre la técnica.

 

6. Elige el objetivo adecuado

Fuente: Google

Una lente de retratos de alrededor de 85-130 mm (o equivalente) funciona bien con los gatos, lo cual es de acuerdo a la distancia de trabajo suficiente para que no se desvíen instantáneamente hacia usted. Si también es un objetivo macro, como el clásico macro Tamron 90mm 1: 1 , tendrás la opción de moverte para ver fotos de ojos o incluso patas ultra-cercanas.

Las cámaras compactas o un teléfono móvil normalmente permiten moverse cerca del felino, pero tenga en cuenta que esta cercanía distorsiona la perspectiva y las características de tu gato. A pesar de este inconveniente, las fotos resultantes a menudo son lo suficientemente agradables.

 

 7. Ten en cuenta la exposición fotográfica  

Fuente: Google

La cámara enfocará de forma distinta si el gato es negro o blanco, ya que el medidor de exposición de la cámara a menudo sub-expondrá un gato blanco y sobre-expondrá un gato negro, si estos ocupan una gran parte de la fotografía o si están configurados contra un fondo de tonos similares.

El gato blanco se verá gris turbio y el negro perderá el brillo profundo de su pelaje y aparecerá grisáceo, también. Puede remediar esto utilizando la función de compensación de exposición de la cámara y marcando en una o dos paradas de sobre-exposición para un gato blanco o sub-exposición en negro.

Si se te complica mucho, esto también lo puedes hacer al momento de editarlo.

 

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Sara Leblanc

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Sara Leblanc

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