Abandonar a tu perro en un refugio no debe ser siquiera una opción
Hay situaciones complicadas que se presentan a lo largo de nuestras vidas, las cuales nos obligan a sacrificar muchas cosas importantes. Una de ellas puede ser el seguir compartiendo hogar con tu perro.
Es una importante decisión a tomar el pensar a donde podrías llevar a tu perro en caso no puedas vivir más con él. Para ello debes evaluar todas las opciones posibles, pero la que no debe aparecer en tu lista de posibilidades, por nada del mundo, es dejarlo a su suerte en alguna perrera.
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Sabemos que estos lugares pueden parecer mejores que dejarlos en la calles a su libre albedrío, sin embargo, existe una realidad sobre estos lugares que muchos desconocen o prefieren ignorar.
Dentro de estos lugares, no todos corren con la misma suerte. Un cachorro tiene muchas más posibilidades de ser adoptado, ya que las personas prefieren tener a sus mascotas desde que son pequeños.
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Sin embargo, los perros de más edad, que sufren alguna discapacidad o enfermedad, son los que más tiempo permanecen en espera de un nuevo hogar y muchos de ellos encuentran la muerte antes de salir de ahí.
Muchas perreras tienen como normativa la eutanasia por sobrepoblación de animales o porque ellos ya han estado mucho tiempo ahí y saben que las probabilidades que sean adoptados son pocas. También consideran la salud y comportamientos agresivos que en su mayoría adquieren al estar encerrados.
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Esta cruel y dura realidad para los perros es muy notoria en Estados Unidos. Según la American Society for the Prevention of Cruelty to Animals, más de 7 millones de mascotas ingresan a un refugio. De ellos solo 2 millones son adoptados. Del grupo de animales que no son adoptados, se sacrifican a 1.2 millones, estás cifras corresponden a estadísticas anuales.
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Si eres dueño de alguna mascota que no podrás seguir teniendo a tu cargo, considera muy bien cada opción que tengas sobre el lugar a donde lo llevarás.
Fuente: Cuetameya