Es cierto que los sistemas de iluminación de las cámaras suelen ser bastantes efectivas, pero hay situaciones en las que no podemos captar toda la luz a través de ellas. Es precisamente en ese momento donde interviene la conocida compensación de exposición en fotografía. Esta es una característica que poseen la mayoría de cámaras digitales, con esta función podemos fotografiar escenas que tengan fuertes contraluces.
Primero debemos saber que es la compensación de exposición es el control bidireccional, con el cual podemos aclarar u oscurecer una fotografía. Dependiendo el sentido en que movamos este control. Estos cambios se miden en pasos de exposición. Es importante que recuerdes que un paso equivale a la mitad de la luz que capta nuestra cámara. Por este motivo, si empleamos valores positivos, estaremos aclarando la imagen. Por el contrario, si usamos valores negativos, la estaremos oscureciendo.
Esta función solo se puede realizar con el modo semiautomático, ya que este modelo nos permitirá controlar el resultado final de nuestra fotografía. Además, con el modo semiautomático podremos llevar el exposímetro a la izquierda o derecha, dependiendo el objetivo que tengas con tu fotografía. En modo automático es imposible realizar una compensación de exposición, ya que es la cámara la que decide por nosotros.
Es importante, antes de realizar este ajuste, que nos encontremos en modo semiautomático. Así, podremos desplazar el exposímetro de un lado a otro. Ten en cuenta que si has seleccionado un determinado valor de compensación, y luego decides pasar al modo manual, permanecerán los valores que ingresaste.
Debido a que esta técnica no es muy frecuente, es preferible que una vez que consigas una buena captura, vuelvas a dejar el exposímetro en cero. Así, evitarás inconvenientes en fotografías futuras.
Si cuentas con una cámara digital podrás encontrar este ajuste representado por un botón con los símbolos +/-. Aunque, si estás fotografiando con una cámara compacta puede ser necesario que leas el manual para que encuentres esta configuración.
Ahora que sabemos cómo se configurar nuestro dispositivo, veamos un ejemplo:
Imagina que estás realizando una fotografía de retrato, para la cual necesitarás poca profundidad de campo. Además, te encuentras en una zona que no tiene iluminación directa. Comienzas a disparar y te das cuenta que las fotos te están quedando oscuras. Pues lo que está sucediendo es que el exposímetro está llevando la luminosidad a un gris medio. Dando como resultado imágenes con menor brillo. ¿Qué podemos hacer para corregir ese efecto? Es aquí donde interviene la composición de exposición, podemos conseguir corregir este efecto dando un paso completo
La apertura no va a variar, sin embargo la velocidad de obturación sí será más lenta. Con esto lograremos tener retratos con un mayor brillo. No olvides siempre estar pendiente de la velocidad de obturación, no vaya a ser que éste sea más lenta y no se ajuste a tus necesidades.
Este tipo de ajustes en la compensación en la fotografía, se suele usar cuando se quiere lograr un efecto de sobreexposición o una subexposición. También, es ideal para evitar realizar tantas correcciones frente al ordenador, ya que con esta técnica podemos conseguir fotos más acabadas. Si aprendes a usar esta configuración, podrás disminuir el tiempo de edición que hagas normalmente. Sin embargo, es importante que conozcas al detalle los límites de tu cámara y saber cómo esta mide la luz en diferentes situaciones.
Para saber cómo usar la compensación de exposición en nuestras fotos, pues esto dependerá del aparato fotográfico que estés usando, la luminosidad que tengas y el resultado que estés buscando. Recuerda, no te fíes de la apariencia que tenga la foto en la pantalla, Debes guiarte del histograma, ya que este es el elemento indicado y más preciso que tienes. Este te dirá si la compensación que has ingresado es demasiado alta o no, en comparación con las primeras instantáneas que has realizado.
Aunque, puedes guiarte introduciendo una compensación positiva o negativa de un paso completo. Esto casi siempre es suficiente, sobre todo si no queremos arruinar el archivo. Por eso, es tan importante que conozcas tu dispositivo fotográfico al detalle, ya que dependerá mucho de éste y también de tu estilo fotográfica.
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