¿Puede alguien pagarse la universidad jugando videojuegos?
Hasta hace pocos años, pensar en videojuegos era atribuirlo a un joven que no hace nada por la vida y que se la pasa sentado frente al televisor solamente jugando. Y es que si bien sí hay adeptos que hacen su vida así, esto ha ido cambiando con el tiempo y, como hemos mencionado anteriormente, los videojuegos son cosa seria dentro de un rubro que genera millones de millones a nivel mundial. Pero, ¿qué tan válido o lucrativo puede ser enfocar tu vida en esto?
Hoy, las universidades norteamericanas ya no se fijan únicamente en los deportistas de fútbol, béisbol o baloncesto, por ejemplo, para jalarlos a sus arcas y becarlos con el fin de sumar puntos para la institución. Desde el 2014 una nueva categoría, la de los eSports (deportes electrónicos), califica también para recibir una beca. Y si uno quiere acceder a ella tendrá que demostrar otro tipo de habilidades, como poseer una gran concentración y agilidad mental, determinación para ganar y poder trabajar en equipo para lograr las metas con el teclado y el ratón.
Si una cree tener este tipo de destrezas y tiene una pasión por los videojuegos o los juegos online entonces sería bueno que consideren esta opción de poder representar a universidades en campeonatos de videojuegos.
Uno de los lugares que brilla por esto es la Robert Morris University, en Chicago, primera institución en el mundo que ofrece una beca deportiva de este tipo. Ahí, una veintena de estudiantes becados integra el equipo oficial de la universidad, llamado Eagles (Águilas), quienes juegan en League of Legends a nivel de competición.
Pero acá no solo se trata de jugar como un talentoso aficionado. Se trata de jugar como todo un profesional. Es por ello que cuentan con un complejo programa que va desde entender los videojuegos desde el punto de vista de su creador hasta conocer las consolas por dentro y los perfiles de sus adversarios a la perfección.
Kurt Melcher, uno de los entrenadores y director del programa de becas para deportes electrónicos de la universidad de Chicago, explica que en la liga universitaria están inscritas otras 105 facultades, pero ellos son los únicos que cuentan con algún tipo de beca e-Sports. Su equipo practica de lunes a viernes en bloques de cuatro horas, y cuentan con instalaciones específicas para jugar, con teclados, pantallas y sonido de última generación. Y al igual que en otros deportes tradicionales, los jugadores tienen también sesiones de crítica y análisis de táctica con sus demás compañeros y entrenadores.
¿Amor al chancho o al videojuego?
Eduardo Cioffi lleva casi cinco años jugando a League of Legends. Se enteró de esta modalidad de becas a través de Reddit y no pensó que pudiera ser verdad. Tras comprobar que sí, pensó que no lo llegarían a elegir, pero aun así lo intentó y acabó siendo seleccionado. Cioffo indica: "Se puede decir que era un adicto al videojuego", reconoció, "pero aquí tienes que jugar tanto para estar al día y para ser el mejor. Estamos invictos y eso es porque practicamos muchísimo", añadió.
Sondra Burrows, otra estudiante becada, admite que sus intereses y "su vida" giran en torno a los videojuegos y a los deportes electrónicos en general. Pero ahí no termina la cosa. "También me gustaría hacer un curso universitario en desarrollo de videojuegos. Incluso, si no llego a convertirme en una jugadora profesional voy a seguir en este ambiente. Trabajaré en marketing, en gestión, en lo que sea pero mantendré mis manos en esta industria".
Millones de dólares “en juego”
Uno de los juegos que más a dado que hablar es, sin duda, League of Legends. Se realizan diversos campeonatos en base a este juego multijugador en el que cada "deportista" controla a un campeón para juntos luchar y derrotar al enemigo. A esta modalidad de juego se le llama MOBAG (Multiplayer Online Battle Arena Game) y ciertamente ha creado toda una fanaticada que no se pierde ni un instante de esto.
En el 2014, el mundial de League of Legends se realizó en la cuna de los deportes electrónicos: Corea del Sur. Ahí, cerca de 40,000 seguidores de todos lados llegaron para concentrarse en el mismo estadio donde se jugó la final del mundial Japón 2002 para ver jugar al equipo profesional surcoreano Samsung White en acción. Al final ganaron y se llevaron $1 millón como premio.
Para tener una idea cómo este rubro funciona y lo entretenido que es, la empresa V Squared Labs de Los Ángeles creó para Blizzard Entertainment el más alucinante escenario para jugar el campeonato de otro conocido juego, StarCraft II, el cual proyectaba imágenes en 3D gracias a las 24 cámaras que tiene instalado.
Blizzcon Starcraft 2 from V Squared Labs Inc. on Vimeo.
¿Jugar videojuegos es lo mismo que practicar un deporte tradicional?
Existe una confrontación entre si uno debería estar jugando videojuegos o si debería estar jugando al aire libre como se solía hacer muchos años atrás. Para el director del programa, Kurt Melcher, al margen del ejercicio cardiovascular cree que hay muchos paralelos con los deportes tradicionales.
"League of Legends y otros deportes electrónicos son igual de competitivos. Cuando veo a los jugadores en esta sala, practicando, están al mismo nivel de competición que los que juegan fútbol, béisbol o rugby", afirma. Añade que el gamer "está muy orientado al detalle, tiene que tener mucha coordinación manual y visual y tiene que tener una mente estratégica". Finaliza aclarando que todas estas mismas cualidades reflejan de arriba a abajo lo que son los deportes tradicionales.
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