Michael Phelps suma más oros que 174 países en la historia de los Juegos Olímpicos
En los Juegos Olímpicos de Río 2016, el mundo ha observado como Michael Phelps se ha convertido en el mejor deportista olímpico de la historia. Sus 25 medallas acumuladas: 21 de oro, dos de plata y dos de bronce, lo hacen inalcanzable. Es así como el nadador estadounidense, de 31 años, tiene más preseas doradas que 174 países y solo le sobrepasan 31 naciones.
Ni Argentina (19 medallas de oro), Jamaica (17), ni México (13) han logrado reunir tantos oros olímpicos como el nadador. Y si el tiburón de Baltimore en lugar de nadar para Estados Unidos se hubiera independizado y fuera un país, estaría en la posición 32 del medallero histórico de las Olimpiadas, siendo Cuba y Brasil los únicos dos países de América Latina que están por encima suyo.
Con sus -hasta ahora- 25 medallas en total, dejaría atrás países como Croacia (24), Georgia (24) o Portugal (23), dato que podría modificarse si estas naciones consiguen nuevos galardones antes del 21 de agosto. El puesto 32 es un resultado espectacular teniendo en cuenta que se trata solo de un deportista en una tabla general que contabiliza a 206 países o comités olímpicos nacionales que reconoce el Comité Olímpico Internacional.
¿Cuál es la idea de Michael Phelps?
Con tantos premios adquiridos, es lógico preguntarse: ¿cuál es el secreto de Michael Phelps para mantenerse en el más alto nivel de su deporte durante tantos años? Pues, aparte de un arduo entrenamiento diario y mucha disciplina, la dieta del deportista es también fundamental.
Según una investigación de la BBC publicada en 2008, el nadador consume 12.000 calorías diarias, repartidas en tres comidas. En el desayuno, ingiere tres emparedados de huevos fritos con queso, tomate, lechuga, cebollas fritas y mayonesa. Luego, tres panqueques con pedazos de chocolate, una tortilla de cinco huevos, tres tostadas cubiertas en azúcar, un tazón de una avena y dos tazas de café.
Para el almuerzo, Phelps come medio kilo de pasta enriquecida. Dos sándwiches de jamón y queso en pan blanco con mayonesa y para tomar, bebidas energizantes. Ya en la cena, consume otro medio kilo de pasta -quizás con salsa carbonara-, una pizza familiar y más bebidas energizantes. ¡Sí, todos queremos su dieta!
Las calorías que consume Phelps podría alimentar a un promedio de cinco hombres adultos, pero según Barbara Lewin, nutricionista consultada para dicha investigación, su alimentación no es exagerada, ya que necesita de esa cantidad de carbohidratos para que su rendimiento sea al máximo, pues es lo que los músculos requieren para reponerse.
Sin embargo, la especialista señaló que si sigue comiendo así a lo largo de su vida, tendrá que visitar de manera frecuente a un cardiólogo y recomendó evitar las yemas de los huevos, reemplazar el pan blanco con pan integral, agregar frutas y verduras en la dieta.
Los escándalos del Tiburón de Baltimore
A pesar de las medallas obtenidas, Michael Phelps no ha estado exento de problemas en su vida personal y de escándalos que incluso lo llevaron a enfrentar una condena de arresto domiciliario. En agosto de 2009, cuando tenía 23 años, el nadador fue captado fumando una pipa de marihuana durante una fiesta estudiantil en la Universidad de Carolina del Sur.
La fotografía fue publicada en el diario británico News of the World y, por ese motivo, la Federación de Natación de EE.UU. lo suspendió durante tres meses. Por su parte, Phelps pidió disculpas por su comportamiento: “Tengo 23 años, y pese al éxito que tuve en la piscina, actué de manera juvenil e inapropiada, no del modo que la gente espera de mí. Lo lamento, le prometo a mis seguidores y al público que no sucederá de nuevo“.
Pero, en setiembre de 2014 tuvo otro incidente que repercutió en diversos medios de comunicación: fue arrestado en Baltimore por conducir en estado de ebriedad, y -según confesó- ese fue el peor momento no solo de su carrera como nadador, sino de su vida. Por este suceso, recibió una sanción de seis meses sin competir, que lo dejó fuera del Mundial de Natación de Rusia 2015.
Tras una rehabilitación forzosa en el desierto de Arizona, Phelps se reencontró a sí mismo, estabilizó su vida sentimental junto a Nicole Johnson, se convirtió en padre por primera vez (en mayo de este año) y encontró la motivación para participar de estos Juegos Olímpicos. “En Río podré terminar mi carrera de la manera que quería“, indicó poco después de llegar a Brasil.
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