Este artista japonés tardó 3.5 años en terminar esta asombrosa creación
Rebirth se traduce como renacimiento y podría describir muchos aspectos de nuestra vida y los cambios a los que cada persona le toca adaptarse. Renacimiento como el que tuvo Japón luego de un desastre natural en el 2011, renacimiento como el que atravesó este artista japonés y que plasmó en un gran mural.
El artista Manabu Ikeda, empezó a pintar esta obra hace aproximadamente 3 años y medio, a la que le dedicaba alrededor de 10 horas, 6 días a la semana. Su constancia y dedicación se ven reflejadas en este hermoso mural de 4×3 metros. En la escena se aprecia un árbol creciendo a pesar de la contaminación y olas de un tsunami que azotan sus raíces, mientras se recorre el gran cuadro también se pueden apreciar otras microhistorias que el espectador es libre de imaginar.
El mural completo está compuesta por cuatro cuadros, y a pesar de que estuvo revisando los avances para coincidir con las escenas, no es hasta el final que Manabu ve los cuadros juntos y se llena de una mezcla de emoción y satisfacción por el resultado, lo cual resulta muy conmovedor.
“Mi objetivo es expresar fielmente mi visión del mundo en mi composición, pero no representan intencionadamente imágenes detalladas.” indicó Ikeda al Museo de Arte de Chazen. ” Porque veo detalles cuando observo las cosas, en lugar de la totalidad, encuentro pluma y tinta para ser las mejores herramientas para expresar la forma en que los veo. “
Mira parte del proceso a continuación:
A través del siguiente enlace te presentamos a Krzysztof Domaradzki, quien utiliza sus ilustraciones para contar historias.