Esta mujer barbuda de 25 años se ha enfrentado al bullying de la más excelente manera
La belleza es subjetiva y no existen reglas que indiquen los patrones a seguir para trepar en la pirámide de la belleza humana y, como si de una carrera se tratara, conseguir el galardón de la más linda del mundo. Y gran ejemplo de ello nos lo muestra esta mujer barbuda de 23 años que se ha enfrentado al bullying de la más excelente manera para mostrarnos su belleza a pesar de tener algo que para muchos sería un complejo.
Harnaam Kaur es el nombre de esta chica de 25 años de la ciudad de Slough, Inglaterra, que se diferencia de las demás jóvenes de su edad por tener una condición llamada Síndrome de Ovario Poliquistico, lo cual le genera un crecimiento de vello excesivo.
Durante su adolescencia, Harnaam fue víctima del bullying por parte de sus compañeros, situación que incluso la llevó a considerar más de una vez en el suicidio debido a los tormentosos días que tenía pasar por culpa del sin fin de calificativos que tuvo que oír y soportar.
Pero esta increíble mujer encontró la paz que necesitaba al volverse una Sikh, persona creyente del Sijismo, una religión de la India cuya parte de su doctrina indica que el cuerpo humano debe permanecer en el estado natural sin ningún tipo de modificaciones. Tras esto, Harnaan dejó su barba crecer a pesar que su propia familia la increpaba a que no debido a lo que la comunidad donde viven podría pensar. Hoy, la apoyan incondicionalmente.
Esta valerosa mujer vive sus días sin miedo ni vergüenza, nadie le dice cómo se tiene que ver ni vestir y lleva una relación de varios años que la ha llevado al altar y de la cual ambos no podrían estar más felices y orgullosos. ¡Eso sí que es una bella mujer!
Si consideramos algo que es curioso, la belleza, tal como la conocemos, se ha creado por diversos factores que representan a cada país. Eso significa que en donde una persona es bella, en otro país podría no serlo. Así que si uno cree que realmente su belleza es superior a la de los demás, entonces deberían de considerarlo dos veces ya que en otro lugar esto podría no ser así. Ya saben, nunca hay que juzgar. Y es que al final la persona vale no por cómo se ve, sino por lo que es; similar al caso de estos pequeño guerreros que se enfrentaron a un problema que la vida le puso en el camino y del cual salieron victoriosos tras mucho luchar y que mostramos en el enlace a continuación.