Esta pequeña gata fue rescatada y obtuvo un nuevo hogar y una nueva mamá

La historia de la pequeña gata Crenshaw (la gatita gangster), de apenas unos meses de edad, y cómo llegó a ser hija adoptiva de Roxy, una gran Pitbull de 5 años que fue rescatada al igual que Crenshaw, es una historia conmovedora y con un gran final.

 Fuente: Facebook/ Sharra Platt

  Fuente: Facebook/ Sharra Platt

Crenshaw fue encontrada por su actual dueña, Sharra Platt, en una calle desolada y muy peligrosa. Ella vio a una madre con su hija observando a la pequeña cuando iba de camino a casa del trabajo, así que se detuvo a investigar. Resulta que la pequeña Crenshaw estaba sola y asustada y no encontraban rastros de su mamá.

Tampoco encontraron posibilidades de que le perteneciera a la familia de la casa que estaba cerca al lugar en donde la hallaron, ya que había una gran pared impidiendo el paso, por lo que sería imposible que hubiera escapado de allí. Sharra no quiso dejarla sola porque, el lugar no era seguro y de dejarla habría significado una posible muerte, entonces la llevó a casa.

  Fuente: Facebook/ Sharra Platt

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Al llegar, decidió que al día siguiente encontraría un hogar para ella;  tal vez en algún refugio para gatos. Pero a la mañana siguiente se dio con la sorpresa que Crenshaw y Roxy, la mascota de Sharra, se llevaba muy bien con Crenshaw, al punto de acicalarla, jugar con ella y llenarla de lamidas como si fuera una de sus cachorros.

Sharra se conmovió mucho con la escena que decidió dejarla e integrarla a su familia. Y como buena amante de los animales, Sharra hizo que Crenshaw también interactuara con los demás miembros de la familia. Y así fue con Kasey, una perra Pomerania de 11 años y su gato Lucky.

  Fuente: Facebook/ Sharra Platt

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Ahora Crenshaw pasó de una posible vida callejera a un dulce hogar con los mejores compañeros que pudo encontrar y hasta a una nueva mamá. Juega todo el tiempo con Lucky y su cola, se acurruca con Kasey y mucho más con Roxy, quien es con quien mayor conexión hubo.

Ahora Roxy, es su nueva mamá y cumple con todas las necesidades que Crenshaw requiere, tal y como lo haría con alguno de sus cachorros. “Crenshaw es significativa, porque es la sexta animal que he rescatado de esa calle. Tiene una parte de “gangster kitty”, porque el barrio en el que se la encontramos es peligroso”, dice Sharra.

“Ella es cada vez más grande y más fuerte y empieza a aprender y a encontrar las cajas de arena por su cuenta”, según Sharra; quien piensa que Crenshaw ahora es una gatita feliz con sus nuevos amigos y muy inteligente. Gracias a ella, la pequeña crecerá fuerte y en un gran hogar al igual que los demás amigos peludos.

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